Incentiva la lectura y la curiosidad: Las novelas policiales y los niños.

imagenA partir de los diez años, muchos niños poseen las capacidades cognitivas y emocionales para disfrutar las novelas policiales y entender su trama.  Tienen la capacidad para inferir, analizar y observar detalles, lo que les permitirá plantearse hipótesis que los ayudarán a descubrir quién es el culpable, descartando a los que son inocentes.

     Tener que desentrañar un misterio resulta desafiante, entretenido, y de paso, constituye una excelente manera de incentivar la lectura en los niños, especialmente cuando se trata de una saga, porque al terminar un libro se quiere continuar con el siguiente.  Sin duda tratar de comprender los misterios y buscar resolver las incertidumbres es una característica de la inteligencia humana.  Es por eso que el género policial tiene tantos adeptos entre jóvenes y adultos, lo que se ha incrementado en el último tiempo con la irrupción de la novela policial nórdica, con notables escritores como Stieg Larsson y Henning Markell.  Los entrañables personajes de Agata Christie han acompañado a generaciones de adultos y jóvenes con numerosas obras, que escribió hasta los 85 años.

     En Chile, las autoras Jacqueline Balicelis y Ana María Guiraldes, en un concierto a cuatro manos, se han dado a la tarea de describir tramas policiales que fascinan a los niños.  El personaje central creado para esta saga de novelas policiales, es el detective Heriberto Soto, quien se encuentra siempre en el lugar preciso para desempeñar su rol con gran acierto.  Escribir en forma cooperativa constituye un excelente modelo en una sociedad en que la competencia supera con creces a la cooperación.

     Lo novedoso en la creación de las autoras es una especie de final abierto, en el cual se puede conjeturar quién es el culpable entre varios personajes, todos posibles pero a la vez bastante improbables. La respuesta al enigma policial está escrita de una manera ingeniosa al final del libro, lo que lo hace más interesante aún, ya que es necesario un espejo para leer la respuesta correcta, que está escrita al revés.

     El hecho de que sean cuentos cortos incentiva la lectura y atrae la curiosidad, no sólo de los niños, sino también de los adultos, y como dice Heriberto Soto, en el caso de los tres colores “Nada es tan difícil, si uno sabe mirar”.  Lo complejo de la trama es que nadie está libre de sospecha.  Al develar el misterio, se aprende que las aparicencias engañan y personas que se presentan como muy respetables pueden cometer delitos, y que el culpable siempre entrega una pista que lo delata.

     La lectura conjunta con los padres es posible en la medida que son cuentos cortos.  Como la resolución del enigma se da al final del libro, se puede jugar a encontrar al culpable y a defender con argumentos la elección hecha.  Lo mismo podría hecerse en la sala de clases, desarrollando así las habilidades de pensamiento de los alumnos.

     Si quiere pasar un buen rato con sus hijos y desarrollar la motivación por leer, les aconsejo la lectura de “Nuevos casos misteriosos”.  Muchos buenos lectores se inicaron con las novelas policiales.

Psicóloga Neva Milicic.

Fuente: “Revista Ya” El Mercurio

Deja un comentario


Notice: Undefined variable: user_ID in /home/lttlgm26vo3t/public_html/colegioaconcagua.cl/wp-content/themes/aconcagua/comments.php on line 51